Recordando lo que escribía en este blog hace unas semanas, el inicio del año 2022 para los precios de la renta fija de EEUU es probablemente el peor de la historia desde la Segunda Guerra Mundial. El bono del tesoro americano a 10 años acumula pérdidas de aproximadamente el -8% y todavía no han transcurrido los cuatro primeros meses de este infausto ejercicio para los mercados de bonos y acciones globales. En la citada columna de principio de mes, citaba varias formas de aprovechar ahora la renta fija. En general, todas están funcionando bien en este mes de abril y alguna, como es el caso de la renta fija estadounidense, ha mejorado el momento de entrada en sus plazos largos.
La fortaleza de la economía americana…
Por mucho que la prudencia impere en las declaraciones de los miembros de la Reserva Federal (Fed), no se vislumbra recesión en EEUU. Si miramos a la curva de rendimientos de los bonos americanos (referencia que para muchos puede dar una señal de recesión inminente), ésta nos envía un mensaje de fortaleza económica. Las causas tradicionales de la recesión – el aumento del desempleo y el exceso de capacidad del sistema en relación con la demanda – tampoco se observan en estos momentos pues el mercado laboral está más ajustado que nunca en muchas décadas (en niveles previos a la pandemia) lo que ayuda a que el consumidor siga disfrutando de un excelente estado, mientras que el mayor problema al que se enfrenta la economía estadounidense es el exceso de demanda, no el exceso de oferta.
…hace que el Dólar se aprecie…
El Dólar se mantiene en zona de máximos de dos años frente al euro. La programada subida de tipos en EEUU, ya en marcha, la citada fortaleza económica del país y el conflicto armado Rusia/Ucrania muy alejado de su frontera con un impacto menor que en otras economías, explican en parte el favorable comportamiento del billete verde que se mueve en el entorno de 1,08 EUR/USD reflejando una revalorización en lo que llevamos de año de cerca del +5%.
…y realce el atractivo de las rentabilidades que ofrecen las distintas alternativas de renta fija
Como nos recuerda la gestora americana Lord Abbett, dentro de la renta fija pueden aprovecharse, por un lado, las rentabilidades incrementales del corto plazo (fuerte movimiento de los tipos a corto plazo en previsión de las subidas de tipos de la Fed) mediante los fondos del mercado monetario, y los mayores diferenciales de crédito derivados de la reciente volatilidad a través de estrategias de renta fija multisectoriales diversificadas y flexibles. Es también posible actualmente beneficiarse de la subida de los tipos a corto plazo a través de préstamos bancarios a tipo variable, así como intentar explotar la potencial futura apreciación de los bonos del Tesoro con mayor Duración (la rentabilidad del Treasury a 10 años se sitúa casi en el 3% vs. menos del 1% la del Bund) y su componente de cobertura.
La Fed seguirá marcando el camino y la volatilidad de los bonos puede remitir
Vistas las fuertes tensiones inflacionistas que pueden prolongarse durante más tiempo, es muy probable que la Fed suba el tipo de interés oficial en 50 puntos básicos tanto en mayo como en junio, alzas que irán seguidas por una serie de subidas de 25 puntos básicos. Las estrategias de inversión mencionadas más arriba pueden suponer un colchón para absorber tanto la inflación como ese endurecimiento de la política monetaria de la Fed.
En resumen, es previsible una ralentización del crecimiento estadounidense en los próximos 12 meses (lo comprobaremos ya en los datos de PIB del 1T-22) pero no una recesión y, con las expectativas de tipos alcanzando su punto máximo, es muy probable que la volatilidad de los mercados de renta fija americanos comience a remitir. Todo ello, junto con la solidez de la economía, proporciona una buena base tanto para la renta fija soberana como para el crédito americanos.
Asesórense bien y sean prudentes.