El próximo 2 de abril, ya conocido como el “Día D”, es la fecha que el presidente estadounidense Donald Trump ha denominado «Día de la Liberación». Se espera que implemente aranceles recíprocos, junto con un arancel del 25% a las importaciones de automóviles anunciado la semana pasada.
La inestabilidad causada por la escalada de su guerra comercial ha sacudido los mercados y las Bolsas podrían experimentar aún más turbulencias dependiendo de qué se anuncie finalmente. Parece que lo que hay en la cabeza de Trump es un conjunto de aranceles que promete liberarán a Estados Unidos de productos extranjeros.
La incertidumbre creada por Trump sigue penalizando
Las perspectivas extraídas de las guerras arancelarias de 2018-2019, junto con la andanada inicial de Trump 2.0, no han servido de guía sobre lo que nos espera esta vez. Es cierto que los inversores parecen estar tomando los riesgos arancelarios más en serio y de ahí la volatilidad elevada, sobre todo, en las Bolsas americanas con caídas acumuladas del -6% al -9%.
Algunas medidas, como el 25% de arancel a las importaciones de acero y aluminio, ya entraron en vigor y otras como la del 25% a los automóviles fabricados fuera de EEUU lo harán el próximo 3 de abril. La propia Reserva Federal considera, y así se pronunció su presidente Jerome Powell, que la incertidumbre es muy elevada y, de hecho, la inestabilidad creada por esta política comercial alcanza el nivel más elevado de los últimos 50 años según contaba The Economist hace unos días.
Y por si había alguna duda, miren este gráfico de JP Morgan que muestra el índice de incertidumbre de la política comercial de EEUU:
Fuente: LSEG Datastream, policyuncertainty.com, J.P. Morgan Asset Management. El índice de incertidumbre de la política comercial mide la frecuencia de artículos recientes en 10 grandes periódicos estadounidenses que discuten la incertidumbre económica relacionada con políticas y que también contienen una o más referencias a la política comercial. Datos al 28 de marzo de 2025.
¿Qué se espera que pase finalmente?
El punto de partido es complicado. Es cierto que en las relaciones comerciales de EEUU el resultado neto con sus principales socios comerciales no le favorece como refleja este cuadro elaborado por Banca March:
Visto lo anterior y las últimas declaraciones del presidente americano, es casi seguro que la política arancelaria que se anuncie se centre en los aranceles “recíprocos” que igualarían las tasas cobradas por otros países. Esto seria probablemente una solución intermedia a la agresividad recíproca, si bien en todo caso lo fundamental serán los detalles de cómo se calcularán estos aranceles “recíprocos”.
El que podría ser mejor escenario se basaría en que de lo anterior se derivara la posibilidad de entablar negociaciones, dado que permitiría que los países extranjeros terminaran reduciendo sus aranceles y/o acordaran mayores compras de bienes estadounidenses. Con ello, EEUU podría no avanzar más con su punitiva guerra comercial y el potencial daño al comercio internacional se frenaría.
Como escribía recientemente el gestor de inversiones de Olea Gestión Hernán Cortés, “hay que aceptar que entre economías desarrolladas prevalezcan aranceles similares, siendo la reciprocidad la alternativa más justa”. Coincido con esa visión ya que evitar una cadena de represalias es fundamental para dañar lo menos posible el crecimiento global. Veo además muy posible que finalmente los aranceles sean de corta duración si Trump estima que puede llegar a un acuerdo en la línea aquí comentada después de imponerlos.
El MAGA se está convirtiendo en MEGA
Quede como quede el resultado final de todo esta ceremonia “trumpiana” de la confusión y del ruido arancelario, hay una cosa segura: gracias a Donald Trump y a su obsesion por el MAGA (Make America Great Again), éste está conviertiéndose en MEGA (Make Europe Great Again), para satisfacción de los europeos que se han aproximado al Reino Unido como no se veía en muchos años y están organizando su sistema de defensa común. Lo que nos podía esclavizar, al menos por ahora, nos está liberando.